sábado, 17 de septiembre de 2011

El Lado Oscuro del Corazón


"Me importa un pito que las mujeres tengan los senos como magnolias o como pasas de higo; un cutis de durazno o de papel de lija. Le doy una importancia igual a cero, al hecho de que amanezcan con un aliento afrodisíaco o con un aliento insecticida. 
Soy perfectamente capaz de soportarles una nariz que sacaría el primer premio en una exposición de zanahorias; ¡pero eso sí! - y en esto soy totalmente irreductible - no les perdono, bajo ningún pretexto, que no sepan volar. Si no saben volar ¡pierden el tiempo conmigo!"


Con este texto de Oliverio Girondo y esta imagen del personaje principal, comienza la extraordinaria película, "El lado oscuro del corazón".
Si tienes oportunidad de verla, no lo dudes, no te arrepentirás.  Los diálogos de los personajes son poemas de Oliverio Girondo, Mario Benedetti y Juan Gelman y con la participación de Mario Benedetti recitando algunos poemas en alemán.
Película que combina poesía, música, amor, soledad, tristeza, llanto, muerte, humor, sarcasmo, amistad, todos estos sentimientos acompañan a los personajes, pero sobre todo a Oliverio en la búsqueda incesante y desesperada  de "A la que vuela". Les comparto algunos de los textos de la película.




Oliverio y la Muerte:


-¿Y ya la encontraste?
-¿A quién?
- A la que vuela.


En otro encuentro de Oliveiro con la
 muerte:




-Perdón pero el caballero que  acaba de encontrar al amor de su vida
no puede perder demasiado tiempo hablando con la muerte.
No me esperes, voy a llegar tarde.















Oliveiro y Ana:
-Ya no me es posible concebir, ni tan siquiera imaginar, 
que se pueda hacerse el amor más que volando... ¡te quiero!
-Yo también, pero puedo quererte sin tenerte,
hemos volado juntos, qué más hace falta.


-Nunca veas a una puta con luz de día, es como mirar una película con la luz encendida. 
Como el cabaret a las diez de la mañana, con los rayos de sol atravesando el polvo que se levanta cuando barres. 
Como descubrir que ese poema que te hizo llorar a la noche, al día siguiente apenas te interesa. 
Es como sería este puto mundo si hubiera que soportar las cosas tal y como son. 
Como descubrir al actor que viste haciendo Hamlet en la cola del pan. 
Como el vacío cuando te pagan y no sentís ni siquiera un poquito. Como la tristeza cuando te pagan y sentiste por lo menos un poquito. Como abrir un cajón y descubrir una foto de cuando la puta tenía nueve años. Como dejarte venir conmigo sabiendo que cuando se acabe la magia vas a estar con una mujer como yo, en Montevideo.



Una más con la Muerte:
-¿Qué paso? Te llevo a volar y te  dejo caer desde lo alto, te advertí que ibas a salir herido.
-Es mejor herido que dormido, como hasta ahora
- Te gusta sufrir.
- A veces una herida te recuerda que estas vivo, es esto el amor, mí estúpida muerte, ¡es esto!, como explicártelo pobrecita, si entendieras esto estarías viva. 








Ana me partió el corazón, pero al herirlo lo creó, nunca lo entenderías, ¡Mi pobre Ana! ¡Mi querida Ana!
nunca hubiera  podido pagarte esto que hiciste en mí, iluminaste el  lado oscuro de mí corazón.
Por qué decidiste permanecer tan pobre, dejándome a mí tan rico.


Si gustas de la poesía, música y cine, no dejes de ver este film.

sábado, 3 de septiembre de 2011

Hoy que es mí cumpleaños

Al empezar a escribir sobre mis sentimientos y  sensaciones que me provoca el día de hoy,  recibo una llamada, un mensaje  de  amigos que  están lejos, pero los  sé cerca, y también de mi familia que siempre ha estado conmigo, para felicitarme por el día que hoy acontece.

Hoy es mi cumpleaños número... número... treinta y cinco,  ¡Vaya! A algunos les parecerán pocos, a otros como a mí, me parecen muchos. No acostumbro a  darle importancia a mis cumpleaños desde que tenía quince, antes de los quince, los años  me parecían eternos, largos, los años pasaban frente a mis ojos  lentísimo, entre enero y diciembre  para mí estaba la palabra eterno. Quizá porque parte de mí infancia y adolescencia la vivía jugando "corretiza", al "stop" y al "piso"con los vecinos de "mí calle" y con mis hermanos que eramos un desastre,  la pasaba soñando despierta: "un día seré como...", "quiero ser como...", "voy a ser como...". 

 Recuerdo el primer verso que me acercó a las letras: "Me  gustas cuando callas,  porque estás como ausente..." , y me pregunté ¿Cómo es que alguien puede escribir algo tan hermoso?, al niño que me hizo sentir esa sensación de mariposas en el estómago, el tremendo golpe que me lleve por aprender a andar en bici, el primer beso, el regaño  de  mis padres por esconderme "allá abajito" con el autor intelectual  del primer beso...

Después el tiempo empezó a transcurrir tan rápido, se acabaron los juegos, los sueños, algunos se acercaban, algunos otros se alejaban, los años se venían encima sin darme cuenta....

Hoy aquí, no podría escribir en una noche lo acontecido después de los quince hasta hoy.

Desde hoy me daré a la tarea de darle un giro a estas "Letras en azul" y a mí vida en particular, que si bien ha estado llena de experiencias realmente maravillosas,  sé que me queda mucho por vivir...

Gracias a mis amigos que están lejos, pero los tengo presentes, a los amigos que están cerca y a mí familia.


¡Los quiero!